La atracción puede ser un caso de vida o muerte. Te causará hasta estrés, miedo e insomnio. ¿Habré dicho o hecho algo malo? Hay algo muy gracioso que me pasa, que también le pasa a una muy querida amiga, y como sé que también le pasa a muchísimas personas. ¿Por qué carajo se nos va el aire cuando estamos frente a esa persona? Es como si no existieran las palabras, la vida, el oxígeno y hasta se nos olvida que estamos pisando tierra firme. La mirada fija de ella en ti puede causarte hasta un desmayo emocional. Entonces ella te habla, y te quedas pensando. ¿Estaré presentable? ¡Mira sus bellos ojos! ¿Cómo le respondo? ¿Le gustará mi voz? Y esos segundos que pasan mientras tienes una conversación contigo, serán después la causa de tu angustia. ¿Lo habrá notado? Claro que sí, me tardé en darle una respuesta. Y tanto problema que te haces por dentro, que seguro ni le paró. Y es entonces cuando no puedo evitar preguntarme, ¿por qué dejamos que el miedo nos detenga cuando tenemos miles de oportunidades ahí afuera?
Wallflower.
No hay comentarios:
Publicar un comentario